Regalar arte no es tan común porque una pieza de arte no es un objeto común, posee muchos elementos internos y externos a considerar. Lo que tú piensas y sientas por la pieza, lo mismo para el receptor. En este sentido, a la persona que le regalas arte la consideras muy especial en tu vida porque la conoces tan bien que sabes que esa pieza que le regalarás la derretirá así como la pieza de Michele Giustolisi, il gusto del bacio, 2022.
Entender a la persona…
Una de las primeras consideraciones a tomar en cuenta es conocer o entender a la persona. Imaginarse dónde colocar la pieza de arte también cuenta. Es muy importante comprender la personalidad, gusto y espacio de la persona a la que le regalas la pieza de arte. Por ejemplo, compraste un cuadro de casi 2 metros de largo, pero la persona no tiene la pared para colocarlo o si es un cuadro muy brillante con un impresionante uso de la Luz y los colores primarios, justo a una persona que no se complementa con ese tipo de tonalidades.
No es un regalo normal…
Otra cosa a entender es que regalar arte no es un regalo normal, el sentimiento se asemeja a cuando te escriben y cantan una canción a capella, es algo único, no hay en cantidad, ninguna otra persona tendrá algo igual. Comprender lo anterior te pone a pensar en lo importante que es el regalo y lo importante que es la persona a la cual se lo darás.
¿Cuál va primero? Tu gusto o el del otro…
Cuando estás al frente de las piezas de arte, decidiendo qué le regalarías, qué opinión es más importante para ti. Lo que la otra persona piensa en tu gusto, lo que tu piensas del gusto de la otra persona, quizás que la pieza representa una forma en la que tu ves a esa persona o lo que sientes por esa persona también está indirectamente relacionado al arte.
Explicas o no el regalo…
Le das la sorpresa o le explicas de que se trata y porque lo escogiste. Inclusive decirle antes de comprarlo es una carta a favor siempre, porque igualmente es tu idea y así la otra persona tiene una idea de lo que quiere y donde lo quiere colocar. Recomiendo que solo si solamente conoces muy bien a la persona o no te importa quedarte con el regalo, que lo compres con completo anonimato y sorpresa.
¿Qué pasa si no le gusta?
La opción más obvia es que te lo dejas tú, igualmente a ti te gusta. La otra opción es que se lo expliques y el porqué de la compra. Lo anterior sucede en muchas ocasiones, las personas toman la decisión de comprar arte cuando conversa con el artista y se entera de sus pensamientos e intereses al crear esa pieza, con esto la persona se siente más cercana y comprende el significado.
Sin importar, el caso de adquirir arte y regalarlo es especial y quedará un recuerdo muy bonito.
Ciao a tutti!